El último martes 3 de setiembre, dos misiles balísticos rusos impactaron en un centro de entrenamiento militar, un hospital cercano y edificios residenciales en la región centro-oriental de Poltava en Ucrania, matando al menos a 50 personas e hiriendo a más de 200, informó el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
El ataque fue uno de los más mortíferos que realizaron las fuerzas rusas desde el inicio de la guerra hace más de 900 días, el 24 de febrero de 2022.
Leer más: Un asistente y el atacante murieron en atentado en mitin contra Donald Trump
Segundo ataque a Ucrania
Al día siguiente de la masacre en Poltava, Ucrania sufrió este miércoles nuevos bombardeos rusos, en los que murieron siete personas, entre ellas tres niños, en Leópolis, en el oeste del país y a cientos de kilómetros de la línea del frente.
Moscú está intensificado sus ataques contra Ucrania desde que Kiev lanzó una incursión sorpresa en la región rusa de Kursk el mes pasado, ocupando cientos de kilómetros cuadrados.
“Siete personas, incluidos niños, han muerto” en la ciudad de Leópolis, dijo la fiscalía ucraniana en Telegram, explicando que “continúan las operaciones de búsqueda y rescate”.
Un total de 53 personas también resultaron heridas, según la administración militar regional. Al mismo tiempo, más de 50 edificios resultaron dañados en el centro de la ciudad, incluidas dos instituciones médicas y dos escuelas, según el Ministerio de Cultura.
“Escuché gritos terribles e inhumanos”, dijo Ielyzaveta, de 27 años, que vive en el vecindario afectado.
Los edificios en el centro quedaron cubiertos de hollín y había coches carbonizados y escombros esparcidos por el suelo, tal como pudo observar un periodista de AFP.
Esta ciudad del oeste de Ucrania, a casi mil kilómetros del frente y con un centro histórico clasificado como Patrimonio de la Humanidad, se ha librado relativamente hasta ahora de los misiles rusos en comparación con otras del este, el sur y el centro del país.
En la madrugada del miércoles, otro bombardeo en Krivói Rog, la ciudad natal del presidente ucraniano Volodimir Zelenski, dejó seis heridos, según la administración regional.
Zelenski denunció unos “ataques terroristas rusos” y pidió de nuevo a Occidente más medios militares para “poner fin al terror”.
Rusia multiplica los ataques masivos, apuntando a las infraestructuras energéticas de Ucrania o a ciudades alejadas del frente.
Rusia responde
El ejército ruso aseguró el miércoles que su ataque había golpeado un centro de entrenamiento militar donde “bajo la dirección de instructores extranjeros, especialistas en comunicaciones y guerra electrónica (…) fueron entrenados”, al igual que “operadores de drones involucrados en ataques” en suelo ruso.
Varios blogueros y funcionarios ucranianos criticaron al comando militar por concentrar a tantos soldados en un solo lugar, y Zelenski ordenó “una investigación completa y rápida”.
En Rusia, “tres civiles” murieron y dos fueron heridos en bombardeos ucranianos en Novaya Tavolzhanka, un pueblo fronterizo de la región de Belgorod, indicó el gobernador, Viacheslav Gladkov.
Otros ataques dejaron tres muertos, incluidos dos menores, y diez heridos en un mercado de Donetsk, una ciudad del este de Ucrania en manos de las fuerzas rusas, indicó el jefe de la administración regional pro-Rusia, Denis Pushilin.