Más de tres años han pasado desde que la construcción del hospital de Los Algarrobos, en la provincia de Piura, quedó paralizada con tan solo el 35 % de avance físico. El proyecto, que se proyectaba como una solución clave para atender la demanda en salud del cono norte de la ciudad, comenzó con una inversión inicial de S/ 61 millones, pero ahora su culminación requerirá un desembolso total de S/ 94 millones para ejecutar el saldo de obra, según reveló la Contraloría General de la República.
Como se sabe, desde el 2021, los trabajos quedaron paralizados y luego el Gobierno Regional de Piura resolvió el contrato.
Ante este panorama y en un intento por reactivar esta obra emblemática, la Contraloría acreditó una comisión de control preventivo con el objetivo de identificar las causas de la paralización y acelerar su reinicio. “Estamos impulsando el control preventivo con enfoque ciudadano. Esta infraestructura no terminada está afectando directamente a los pacientes”, declaró el vicecontralor Marco Argandoña Dueñas, durante su visita a Piura.
Asimismo, Argandoña indicó que los trabajos pendientes incluyen acabados, equipamiento y componentes técnicos, y que el compromiso institucional será acompañar a las autoridades regionales para que retomen el proyecto cuanto antes. “No solo vamos a alertar, también daremos recomendaciones para superar las trabas legales, financieras y presupuestarias”, añadió.
“Nuestro foco es el ciudadano”
Acompañado del gerente regional de Control de Piura, William Boulanger Jiménez, y otros miembros de su equipo, Argandoña Dueñas explicó que la gestión del contralor general César Aguilar impulsa esta nueva modalidad de control gubernamental y anunció que luego se expandirá a otras actividades.
“Nuestro foco es el ciudadano. Detrás de la obra física, como en el caso de los cuatro hospitales paralizados, hay un paciente que deja de ser atendido. Este enfoque de control preventivo parte de asumir la conciencia social. Pensar en el paciente, en el estudiante, en el poblador de a pie que no tiene acceso”, sostuvo.
Añadió que el rol de los auditores no solo será comunicar o alertar problemas, también hará recomendaciones y sugerencias porque se trata de asumir un compromiso para que la obra se ponga en funcionamiento. Para ello, se hará un análisis de la raíz del problema de paralización desde los aspectos legales, financieros, presupuestarios y técnicos. “El punto fundamental es establecer mesas de coordinación con los actores claves”, manifestó el vicecontralor.