En una operación que sacude los cimientos del sistema de alimentación escolar en el Perú, el Ministerio Público, con apoyo de la Policía Nacional, desarticuló parte de una presunta organización criminal enquistada en el desaparecido programa Qali Warma. Bajo el nombre de “Los fríos del hambre”, la red estaría integrada por funcionarios públicos y representantes de la empresa proveedora Frigoinca S.A.C., quienes habrían manipulado informes para ocultar intoxicaciones masivas de escolares a cambio de sobornos.
El megaoperativo —ejecutado de forma simultánea en Ayacucho, Amazonas, Cajamarca y Ucayali— culminó con la detención de cuatro especialistas alimentarios. Las diligencias incluyeron el allanamiento de 11 inmuebles, la incautación de documentación clave y la movilización de más de 100 agentes de la Dirin y Dircocor, además de once fiscales especializados.
El encubrimiento detrás de los alimentos
Según las investigaciones del Noveno Despacho de la Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios, los detenidos habrían recibido pagos ilegales de Frigoinca S.A.C., con el objetivo de encubrir responsabilidades en casos de intoxicación alimentaria. Los reportes oficiales alterados señalaban falsamente que el origen de los síntomas en los escolares habría sido agua contaminada, y no alimentos en mal estado, como indican evidencias posteriores.
“Esta maniobra tenía como fin evitar sanciones administrativas y garantizar la permanencia de Frigoinca como proveedor del programa estatal”, indicó una fuente policial.
Las autoridades identificaros a Bred Olivier Matis Lope (Ayacucho), José Samuel Floriano Miranda (Cajamarca), Ángel Américo Apagueño Arévalo (Ucayali) y Jean Chuquibala Checan (Amazonas). Todos eran funcionarios del área técnica del extinto Qali Warma, ahora convertido en el Programa Nacional de Alimentación Escolar Comunitaria (PNAEC).
Los fríos del hambre: un sistema corrupto que pone en riesgo vidas
Este caso revela no solo una posible red de corrupción, sino un crimen que pone en riesgo directo la salud de miles de niños beneficiarios de los programas de alimentación estatal. Lo que debía ser un sistema para garantizar el derecho básico a una alimentación saludable, terminó convertido en un negocio opaco donde la impunidad y el lucro se antepusieron a la vida.
Desde el año 2023, las investigaciones comenzaron a trazar un patrón de irregularidades sistemáticas que apuntaban a una estructura criminal organizada para blindar a Frigoinca S.A.C. de consecuencias legales.
PNAEC: compromiso institucional tras el escándalo
A raíz del operativo, el actual Programa Nacional de Alimentación Escolar Comunitaria emitió un comunicado reiterando su colaboración plena con las autoridades. “Reafirmamos nuestro compromiso con la transparencia y la integridad. Seguiremos reforzando los mecanismos de control para evitar que hechos como estos se repitan”, expresó la entidad.
Sin embargo, las dudas quedan sembradas: ¿Cuántas intoxicaciones fueron realmente encubiertas? ¿Qué niveles jerárquicos más altos podrían estar implicados? Y, sobre todo, ¿cuánto ha costado esta red en términos de salud infantil?
Lo que hasta ahora parece un caso de corrupción más, podría transformarse en uno de los escándalos sanitarios más graves del país en años recientes.
🚨 #Ahora | Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios (Noveno Despacho) ejecuta el mega operativo de allanamiento de 11 inmuebles con fines de detención preliminar judicial de cuatro funcionarios de las unidades territoriales del… pic.twitter.com/dRuVkn8Hxt
— Ministerio Público (@FiscaliaPeru) May 23, 2025