La violencia en la región Piura alcanzó un nuevo y alarmante nivel tras una noche de sangre y muerte en la que tres jóvenes fueron asesinados a balazos por presuntos sicarios en diferentes puntos de Sullana y Catacaos. Los crímenes, que ocurrieron con apenas horas de diferencia, causaron pánico entre los vecinos quienes critican la falta de acciones concretas por parte de las autoridades policiales.
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La noche del domingo Marlon Checa Correa (24) y Edgar Ruiz Navarro (29), se encontraban en el parque “Miguel Grau”, ubicado en la calle Santa Teresa, en la urbanización Santa Rosa, en la provincia de Sullana, donde sicarios llegaron y les dispararon sin mediar palabra. De acuerdo con los testigos, los asesinos llegaron a bordo de una motocicleta y dispararon a quemarropa. Edgar murió en el acto, mientras que Marlon trató de escapar, pero finalmente cayó herido a pocas cuadras del lugar donde falleció.
Hasta el lugar del doble asesinato acudieron familiares de las víctimas quienes protagonizaron escenas de dolor.
Aún no se reponía la población de este doble homicidio, cuando se reportó un tercer crimen en la zona baja del distrito de Catacaos. Pobladores hallaron el cuerpo sin vida de Abel Alberto Albán Albán, de 29 años, en la ribera del río Piura. La víctima, que según sus familiares era pescador, presentaba impactos de bala en la cabeza y en la espalda. Su muerte deja a tres menores en la orfandad, aumentando el drama familiar y la indignación social.
La Policía Nacional, en coordinación con el Ministerio Público, inició las investigaciones en las zonas donde ocurrieron los asesinatos, aunque hasta el momento no se reportan detenidos.
Crímenes en aumento
Estos nuevos asesinatos se suman a la escalofriante cifra de casi 80 homicidios registrados en lo que va del año en la región, según cifras de Sinadef, muchos de ellos relacionados con ajustes de cuentas, extorsión y el cobro de cupos por parte de bandas criminales que operan impunemente en diversas zonas de Piura.
Mientras tanto, la ciudadanía exige mayor presencia policial, operativos permanentes y resultados concretos. Además, crece la presión sobre el general PNP Manuel Farías, a quien responsabilizan por la falta de estrategias efectivas para enfrentar el crimen organizado. Autoridades locales solicitaron su relevo inmediato.
