La ampliación del asentamiento humano Angamos, en el distrito limeño de Ventanilla, se convirtió en el escenario de un desgarrador acto de violencia que dejó como saldo la muerte de un joven padre y su pequeña hija de apenas un año y medio, quienes fueron asesinados a balazos por presuntos sicarios.
El ataque ocurrió en un pasaje del distrito, donde tres hombres estaban consumiendo licor en las escaleras cuando un grupo de sicarios irrumpió abriendo fuego indiscriminadamente. Entre las víctimas se encontraba Lankaster Hamir Imán Arévalo, de 18 años, quien cargaba en brazos a su hija.
Según testigos, las balas impactaron en el brazo y el cuello de la menor, mientras que su padre sufrió heridas graves. De inmediato, vecinos trasladaron a ambas víctimas al hospital de Ventanilla, donde lamentablemente perdieron la vida debido a la gravedad de sus lesiones. Otras dos personas también resultaron heridas; una de ellas permanece internada.
Sicarios se ensañaron con víctimas
En el lugar del crimen, agentes del Depincri Ventanilla recogieron 34 casquillos de bala, un testimonio de la intensidad del ataque. Las autoridades manejan la hipótesis de un ajuste de cuentas como móvil del crimen, pero aún se investigan las causas específicas y la identidad de los responsables.
La ferocidad del ataque ha dejado a los vecinos de Ventanilla en estado de shock y ha encendido nuevamente las alarmas sobre la inseguridad en las zonas más vulnerables de Lima. «No se puede vivir tranquilo; ahora ni los niños están a salvo», expresó un vecino que prefirió no identificarse.
La familia de las víctimas y la población exigen justicia, mientras que la Policía Nacional del Perú ya inició las investigaciones para esclarecer los hechos y hallar a los responsables de estas dos muertes.
