Tras más de 15 años de espera, Piura inicia una nueva era en su desarrollo urbano con la construcción de la moderna avenida Sullana. Esta obra, largamente anhelada por la población, mejorará la transitabilidad y calidad de vida de más de 28 mil habitantes en el sector noroeste de la ciudad.
Los vecinos de los asentamientos humanos Los Ángeles, Av. José Escriba de Balanguer, Mónica Zapata, San Isidro, Los Pinos y Los Geranios, así como de las urbanizaciones Los Sauces, Los Jazmines y UPIS Villa Miranda, serán los principales beneficiados con la modernización de esta vía clave. El proyecto no solo reducirá los tiempos de viaje y mejorará la conectividad de la zona, sino que también dinamizará la economía local al facilitar el acceso y transporte de bienes y servicios.
Dolores Calle García, coordinadora del sector noroeste, expresó su satisfacción ante el inicio de las obras: “Hoy, después de tantos años de espera, por fin nuestro sueño se hace realidad. El esfuerzo de todos los dirigentes dio sus frutos”.
El proyecto contempla la ejecución de dos tramos estratégicos:
- Tramo I: Desde la Av. Sánchez Cerro hasta la Av. Cáceres, con una inversión de S/16,1 millones.
- Tramo II: Desde la Av. Cáceres hasta la Av. Dos de Mayo, en el asentamiento Los Ángeles, con una inversión cercana a los S/40 millones.
La nueva avenida contará con pistas de losa optimizada, veredas, ciclovías, áreas verdes, bancas, muros y un moderno sistema de drenaje pluvial. Esta infraestructura no solo garantizará una mejor movilidad para peatones y conductores, sino que también contribuirá a la reducción del deterioro de vehículos, un problema que durante años afectó a transportistas y vecinos de la zona.
Asimismo, el camino hacia la reconstrucción de la Av. Sullana no estuvo exento de obstáculos. La Municipalidad de Piura elaboró el expediente técnico y, ante la falta de presupuesto municipal, se gestionó su transferencia al Gobierno Regional para su ejecución. Luego de una serie de procesos administrativos, en noviembre de 2024 se lanzó la licitación y en enero de 2025 se adjudicó la buena pro del tramo II, con un plazo de ejecución de 300 días calendario.
Esta obra forma parte de un ambicioso plan de modernización de la capital regional de Piura emprendido por la actual gestión regional, el cual también contempla la recuperación del centro histórico de Piura, incluido el drenaje pluvial, renovación de las avenidas Grau, Don Bosco, Gustavo Mohome, Marcavelica, Sánchez Cerro y Los Algarrobos, así como la construcción del Estadio Miguel Grau y el Hospital de Alta Complejidad, entre otros proyectos.
Finalmente, con esta obra, Piura se posiciona un paso más cerca de convertirse en una ciudad moderna y funcional, donde la infraestructura vial deja de ser una limitación para convertirse en un motor de desarrollo y progreso para sus ciudadanos.
