Tras la detención de Agustín Lozano, presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), muchos se preguntan quién asumirá el cargo mientras se está afrontando el proceso judicial. Julio García, abogado deportivo, respondió esa interrogante y dio a conocer que Arturo Ríos Ibáñez, presidente de Atlético Grau, deberá ser el reemplazo y tendrá que tomar el mando del máximo ente del balompié nacional.
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“Se trata de un tema muy grave, va afectar y mucho a la selección peruana porque estamos a puertas de un partido importantísimo contra Chile en ocho días. Obviamente, esta situación debería estar resuelta de inmediato, hay un vicepresidente que debería asumir. Eso no significa que el golpe anímico sobre todo de un presidente que ha estado permanentemente en todos los entrenamientos no va a chocar al grupo. Vamos a ver cómo lo asimilan, qué trabajos hace el profesor Fossati para que esto pase lo más rápido posible”, apuntó el letrado en entrevista con Latina Noticias.
También resaltó la gravedad del caso Agustín Lozano y lamentó la situación porque eso podría afectar directamente a la selección peruana, quien se encuentra en plena preparación para afrontar los duelos con Chile y Argentina en la fecha doble de las Eliminatorias Sudamericanas 2026.
Cabe resaltar, que la vivienda del presidente del Atlético Grau, situada en la urbanización Loma Blanca, manzana F, lote 1 en la carretera Los Ejidos en Piura, fue allanada en el marco de las investigaciones por el caso contra Agustín Lozano. Allí se incautó un automóvil marca Renault de placa ACL-069.
Casos diferentes
Eso sí, García dejó en claro de que las acusaciones que está afrontando Agustín no son las mismas que encararon Manuel Burga y Edwin Oviedo, cuando estaban a cargo del máximo ente del fútbol peruano respectivamente.
“Sobre la operatividad de la Federación es gravísimo porque a diferencia de lo que venía ocurriendo en los años anteriores, ninguna de las acusaciones que afrontaron el señor Burga y el señor Oviedo, tuvieron que ver con el manejo de la Federación. Esos delitos que se le imputa, que todavía no se han comprobado, tiene que ver con el manejo mismo de la Federación. Y desgraciadamente para la mala suerte del señor Lozano, su conducta ha ido avalando el ejercicio arbitrario de las facultades que le da ser presidente de la Federación.