El Papa Francisco ordenó la disolución del grupo apostólico Sodalicio de Vida Cristiana (SVC), una organización católica de origen peruano que ha estado en el centro de una serie de denuncias por abusos sexuales, psicológicos y físicos. Fue el propio Sodalicio que confirmó este lunes la noticia, aunque aclaró que la información aún tiene caracter confidencial.
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En un comunicado emitido desde Aparecida, Brasil, los miembros del Sodalicio señalaron que la filtración de la noticia, adelantada por una página web vinculada al Vaticano, contenía detalles imprecisos. A raíz de esta filtración, se tomó la decisión de expulsar a dos miembros del grupo, después de reconocer su responsabilidad en el hecho.
Asimismo, el comunicado fue claro en manifestar que solo consideran oficiales las noticias publicadas en sus comunicados oficiales y reiteraron su respeto y obediencia al Papa Francisco, quien viene siguiendo de cerca las investigaciones en torno al SVC.
Investigación de periodistas
El pasado 9 de diciembre, el papa recibió a los periodistas peruanos Pedro Salinas y Paola Ugaz, y a la estadounidense Elise Ann Allen, a los que el pontífice transmitió su apoyo luego de que denunciaran ser víctimas de acoso judicial y personal tras la investigación que realizaron al SVC.
Salinas y Ugaz publicaron en 2015 el libro ‘Mitad monjes, mitad soldados’, en el que revelaron los testimonios de víctimas de abusos físicos, psicológicos y sexuales cometidos presuntamente al interior del Sodalicio, una organización católica fundada en Perú en 1971.
Las denuncias llevaron al Vaticano a tomar acciones, incluyendo la investigación liderada por el arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y el sacerdote Jordi Bertomeu, quienes estuvieron en Perú en 2023.
Además, el Papa Francisco expulsó en agosto del 2024 al fundador del Sodalicio, Luis Fernando Figari, tras las investigaciones que lo vincularon con numerosos abusos, lo que culminó en la disolución final del grupo. Desde entonces, hasta 15 miembros del Sodalicio fueron expulsados por casos de abusos sexuales, algunos de ellos en contra de menores.
El caso del Sodalicio de Vida Cristiana pone en evidencia una de las crisis más profundas dentro de la Iglesia Católica en América Latina, y subraya la firmeza del Papa Francisco para actuar frente a los escándalos de abuso que han marcado a diversas instituciones religiosas en todo el mundo.