Atentado con el patrimonio cultural. El centro cívico de Piura, conocido por albergar el emblemático monumento de la Paloma de la Paz, amaneció esta mañana cubierto de grafitis que dañan gravemente su imagen. Las pintas, realizadas con pintura en spray de colores negro, verde, rojo y blanco, abarcan muros, piletas y bancas de granito, afectando seriamente el ornato del histórico espacio.
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El acto vandálico, que conmocionó a la ciudadanía, se realizó en horas de la madrugada. Las pintas, de grandes proporciones —aproximadamente 50 cm de ancho por 70 cm de alto—, son visibles a lo largo de todo el centro cívico, un área que tiene un especial significado cultural y patrimonial para los piuranos.
Acciones inmediatas de las autoridades
Ante la magnitud de los daños, las autoridades municipales detallaron que un equipo de siete trabajadores de la Subgerencia de Ornato, Parques y Jardines, liderados por el ingeniero Cristian Manrique Boulangger, inició esta mañana los trabajos de limpieza. Utilizando tiner y aguarrás, el personal espera eliminar las pintas, en un proceso que se estima durará dos días.
“Son alrededor de 15 pintas a modo de grafitis. Hay pintas que están en las paredes y otras en gratito, cuyo material es costoso y no sale así no más, para volver a su color natural. La comuna provincial rechaza estos actos vandálicos que han causado daños al patrimonio cultural”, expresó.
Por su parte, la Gerencia de Seguridad Ciudadana, Fiscalización y Control redoblará la vigilancia en este espacio para prevenir actos de vandalismo, con más presencia de Serenazgo. Finalmente, Manrique Boulangger enfatizó sobre la importancia de proteger y preservar nuestro patrimonio cultural para las generaciones futuras.
Investigación en curso
El municipio confirmó que las cámaras de seguridad que se encuentran en la zona ya son analizadas para identificar a los responsables de este ataque. Se espera que las imágenes permitan dar con los autores de estos actos vandálicos que causó malestar entre los piuranos.
Por su parte, el alcalde Madrid Orue ha manifestado su repudio a este tipo de incidentes, señalando que se reforzará la seguridad en las áreas patrimoniales de la ciudad para prevenir futuros atentados. “No podemos permitir que nuestra historia y cultura sufran un daño tremendo. Los responsables serán identificados y sancionados conforme a la ley”, afirmó.
Indignación ciudadana
La noticia ha generado una ola de indignación entre los vecinos y defensores del patrimonio local, quienes han expresado su preocupación por el estado de conservación de los monumentos de la ciudad. En redes sociales, muchos piuranos han hecho un llamado a las autoridades para que tomen medidas más estrictas para proteger estos espacios de importancia histórica.
El centro cívico de Piura, con la Paloma de la Paz como símbolo central, no solo es un lugar de gran valor histórico, sino también un punto de encuentro para la comunidad. Su deterioro debido a actos vandálicos es un recordatorio de la necesidad de proteger el legado cultural de la ciudad para las generaciones futuras.